miércoles, 11 de enero de 2012

AFRICA, el mito, la tersura de un sueño infantil

Hoy escribo este “post” porque África es más, mucho más que esa noticia  que “interesa” a los informativos, que cumple con los “requisitos” que se espera de algo que llega desde ese continente, (morbo, bestiales costumbres, sanguinarios dictadores, desgracias con niños famélicos de por medio…...)  es mucho más y ofrece un turismo puede ser para el continente, como para otros países como el nuestro un recurso económico importante.

Africa nos ofrece ese sol que parece recién sacado de un horno y al atardecer muchas veces el cielo le coloca un fino velo que lo destiñe y lo oculta lo justo, igual que unos bellos ojos de mujer los cuales intuimos a través del mismo en un ademán de elegancia y medida coquetería. (Foto: Amanecía sobre el Niger)

Es ese Africa de paisajes y momentos de ensueño, una tierra de dimensiones insospechadas, llanuras que se extienden majestuosas, árboles que la salpican para no perder las referencias. Quizás lo que se nos presente ante los ojos sea un imperio de montañas que se alzan majestuosas, amenazantes y tranquilizadoras dependiendo el momento, escaladas por un verde impenetrable.


Un territorio lleno de secretos, de promesas y seguro que de sueños de niñez, aventuras y cuentos, exploradores míticos y recuerdos de películas inolvidables desde infantiles a adultas, de ensueño y de pesadillas.
(Foto: Crater del Ngorongoro - Tanzania. Una maravilla de la naturaleza)

Un encuentro con culturas inabordables a nuestra mente occidental,  cultura, culturas que no se llegan a comprender del todo nunca


Sus animales, sus parques naturales hacen despertar en nosotros ese “aventurero y explorador” que todos hemos tenido dentro, puede hacernos pasar horas observando ver pasar cualquiera de esos animales o sus sombras, leones, leopardos, manadas de cebras, búfalos, oir sonidos nunca oídos y el tronar de cataratas ocultas por la espesura verde que las protege, entre todos crean ese atractivo que supone la naturaleza salvaje de lo impredecible, del “peligro” unido a la certeza de saberse a salvo.

Sus ciudades y sus caos, sus pueblos y sus “tempos” sus gentes, perderse en sus calles y sentarse a tratar y hablar con ellos, ruido y polvo, sus caos organizado, su color y su olor, sus mercados, su arquitectura, su todo, también su pobreza, pero unida a su dignidad.
(Foto: Día de mercado en Djnné- Mali. Y su señorial mezquita, el mayor edificio sagrado hecho de barro del mundo)




Todo lo anterior, los soñado y lo imaginado, todo invita a emprender grandes “expediciones”…………..esto es quizás lo mejor de todo: el sueño de Africa puede hacerse realidad

Si se me permite, si lo anterior quiere uno que se haga presente, diría: se hará presente siempre que seamos capaces de ser turistas y realizar un turismo responsable, de lo contrario como una novia despechada no nos permitirá ver sus encantos.


Muchas veces he visto que no suele ser así, muchas veces da la sensación de que se llega a “territorio conquistado” o el hecho de que sean económicamente más débiles que nosotros nos de derecho a un tipo de prebendas y actitudes que no a lugar y que a quien desacreditan son a nosotros.

No parece y alguna vez lo he escrito aplicar el sentido menos común de los que tenemos, que es precisamente el sentido común y no adoptar actitudes ni realizar actos, que no se nos pasaría ni por la cabeza hacer en cualquier otro sitio de turismo occidental (por ejemplo y me manifiesto total, absolutamente y radicalmente en contra, dar dinero, bolis, chuches y similares a cualquier niño en la calle porque sí………….no ayuda a nada, solo a que no vayan al cole, por que unos “miserables” céntimos de euro nuestros para ellos pueden ser una fortuna si hay cuatro “blanquitos” que se los dan. Un Boli, para que?, para que acabe igual de “reventa” en el mercado?.


Llevar material escolar, SI, una pequeña bolsa, parar en un cole del camino y darlo todo ahí si servirá. Si vais a comer a un local autóctono, no llevéis vuestra comida, no os dirán nada, pero lo harías aquí. Si la cerveza no está muy fría, antes de reclamar, pensar si hay electricidad de continuo……………no son imaginaciones, todas estas absurdeces las he visto, he oído las reclamaciones y alguna vez, no me he mordido la lengua………….sentido común y preguntemosnos: Lo haría en allí, en Mallorca, en Cádiz, en La Costa Azul? La misma respuesta vale en el corazón del maravilloso continente que es Africa.


domingo, 8 de enero de 2012

AFRICA........LA CONOCIDA ? Y LA GRAN DESCONOCIDA

Existe un Africa que todo el mundo conoce, incluso sin haber estado allí nunca. El Africa de Karen Blixen,  el Africa  de Memorias de Africa, las que aparecen una y otra vez en las pantallas de televisión; la de las costas y lo s parques nacionales, vendidos como paraísos de ensueño en las revistas del glamour; la de la música y la de la moda, que celebran su renacimiento en los estudios y en las pasarelas periódicamente.
Pero existe un Africa que nadie conoce, incluso habiendo estado allí.

El continente negro esconde sus secretos y sus peligros, pero también sus momentos de felicidad más grandes, continente que alberga paisajes tan fascinantes y desconocidos como el desierto de Mauritania, los peñascos de Mali o los lagos pantanosos de Benin.



Muchas de sus tribus que en ella habitan no aparecen ni en los crucigramas y las tradiciones que ellas protegen, transportan a los visitantes a otro mundo y a otro tiempo.

Aquel que vea las chozas de arcilla, las casas de los dogón, que parecen brotar de la misma piedra o los edificios decorados en blanco y negro del pueblo kassena, las estructuras que se alzan desde el suelo en una mezcla de arcilla y paja con sus “escaleras” externas para su conservación, su perdurabilidad y resistencia ante los “elementos”, pensará en todo menos en el concepto “arquitectura”, aunque justo de eso se trata.


Espacios vitales que se adaptan a su entorno y a la vez surgen de él, que satisfacen las exigencias del día a día y al mismo tiempo dejan paso a la creatividad, que respeta los rituales aun estando abierto a las innovaciones.


A pesar de las posibilidades, la mayor de las veces limitadas, también se observa el amor por el detalle, como se manifiestan en pinturas murales, en las decoraciones y tallas de madera que rebosan contenido simbólico y expresan la unión entre el ser humano, su entorno y el cosmos.







Quizá el “estilo” de Africa no sea un modelo a seguir para una vida fuera de ella, ni para la gran pantalla o la pasarela, pero agudiza el sentido de la belleza y armonía sencillas, posibilita la visión del pasado y el presente sobre todo de pueblos amenazados y con ello, ayuda a conocer AFRICA