La regla implica relaciones sociales o interindividuales,
ya que en la regla además de la regularidad hay una idea de obligación que
supone la existencia de dos individuos por lo menos. Lo que implica el sentido
de regularidad impuesta por el grupo y su violación epresenta una falta.
En todos los casos aparece una competición entre los
individuos, la victoria de unos individuos sobre los demás y la regulación mediante
un código transmitido de generación en generación, o por acuerdos improvisados.
Pero incluso la satisfacción de la victoria debe estar legitimada por el código
mismo del juego y por una moral del honor y del “fair-play”.
Cuando observamos a los niños pequeños, estos se inician
en los juegos con las reglas más elementales y, sólo a medida que se hagan
expertos, incorporarán e inventarán nuevas reglas. Su práctica va haciendo que
las reglas de sus juegos cada vez sean más complejas, pero también van
modificando la conciencia de estas reglas y su representación, accediendo progresivamente
a una concepción democrática de la regla. Con lo que entienden que las reglas no son
más que el acuerdo de la mayoría de los participantes, y esto mismo es lo que
las legitima. Y este mismo acuerdo les permite modificarlas, legitimar dichos
cambios y situar su origen en las mismas interacciones infantiles.
Tampoco tendríamos que perder de vista que el tipo de
sociedad y cultura determina en una medida muy considerable las relaciones
posibles de un individuo con otros. Así, las relaciones entre niños de distinta
edad son frecuentes en muchas culturas, aunque más en sociedades tradicionales
donde es muy corriente la crianza por hermanos. (este caso lo viví muy
directamente en Wukro – Etiopia, dentro del programa de huérfanos que lleva a
cabo desde hace ya 20 años por lo menos, el padre Angel Olarán y me dejo
gratamente sorprendido su funcionamiento y la armonía detectada en las
Al fin y al cabo, para Delval (1997) el desarrollo es en parte un diálogo con lo que rodea al niño, como la interacción que se produce con los demás miembros de la sociedad bajo unas determinadas regulaciones sociales. Y es en esa interacción donde los adultos, de alguna forma, moldean las ideas de los niños y transmiten las ideas dominantes de la sociedad, produciéndose esto de forma mucho más pronunciada en algunas sociedades tradicionales, haciendo que el cambio cultural y generacional sea menor.
Podríamos concluir diciendo que la práctica de juegos y deportes, tanto en la escuela como fuera de ella, tiene muchos aspectos educativos muy importantes, ya que aprenden unas reglas propias de cada juego pero también aprenden a coordinar sus acciones y a regular la competición.
Y no sería esto la esencia de la DEMOCRACIA???.
No es uno de los mejores
valores que poseemos las sociedades libres?, normalmente unido a la sociedades
más avanzadas? Y como llegamos nosotros a ella?, No sería por el conocimiento?,
es decir por la educación?
Pues lo tenemos todo, el
deporte puede ser un “arma” que aporte su granito de arena para la consecución
de estos objetivos, único camino, en mi modesta opinión de ayudarles a crear y
desarrollar sus propios países, su propias vidas y consolidarse como naciones y
como pueblos, siendo lo que ellos quieran ser y como ellos quieran ser.
No hay comentarios:
Publicar un comentario